La Navidad es la fecha en que los Cristianos conmemoramos el nacimiento de Jesús, el hijo de Dios, y con ese recuerdo celebramos la renovación de nuestra fe y esperanza en nuestro Salvador.
Aún cuando la crisis socioeconómica y política que vivimos, límite la posibilidad de hacer festejos como en otros momentos, celebrar de otras maneras quizás más austeras pero sentidas es necesario porque nos reconforta ,eleva el ánimo, alimenta el sentido de confraternidad, de unión y esperanza haciéndonos más fuertes psicológica,moral y espiritualmente.
¿Será casual que sistemáticamente hayan elegido por años la época navideña para tomar las decisiones políticas y económicas más nefastas? No, eso no es casual…Sabotear la Navidad es una estrategia para deprimir a la gente en las fechas en que tradicionalmente las personas recomponen su espíritu, se llenan de gozo y entusiasmo. Una masa humana deprimida,confundida o paralizada es más fácil de controlar por los factores de Poder. Así nos quieren..
La Navidad no es un festejo, es un sentimiento! un sentimiento que florece cada año para hermanarnos en el amor, la solidaridad, la generosidad , la fe en Dios y la esperanza en el porvenir. Es la época en la que soñamos y nos prometemos un año mejor. De manera pues, que NO DEBEMOS DEJARNOS ROBAR ese sentimiento, los sentimientos son inalienables e intransferibles, son experiencias íntimas y personales.
¿Como vivir entonces está Navidad a pesar de la crisis?
1. Conserve los rituales navideños que le sean posibles con lo que usted pueda disponer. Coloque su pesebre, haga su árbol de Navidad así sea con creativas ideas a partir de materiales de reciclaje, asista a las misas de aguinaldo y practique cualquier ritual familiar que acostumbre. Los rituales aglutinan a las personas, y cuando nos unimos nos sentimos más fuertes.
2. En la Nochebuena reúnase con sus familiares, amigos y allegados, cada uno puede aportar algo para disponer una comida aunque sea sencilla, es una buena ocasión para conversar, recordar momentos buenos, soñar y planear las metas del año por venir. Rodearnos de personas positivas nos da ánimo, renueva las fuerzas y el entusiasmo.
3. No se preocupe porque no pueda comprar regalos. ¿Quien dijo que todos los regalos se compran? Ofrezca regalos del corazón! Obsequie tiempo para compartir humanamente, regale conversaciones gratas, motivos para reír, comparta con quienes ama algunos de sus mejores dones:¿tiene linda voz? Sorpréndalos con su mejor canción, ¿prepara algún rico platillo? Ofrézcase para prepararlo si cada quien suma un ingrediente. Cualquier pequeño detalle ofrecido con disposición y amor es el más fabulosos e invaluable regalo. Si no puede intercambiar regalos intercambie ideas para salir de las dificultades.
4. Actúe el sentimiento de la Navidad ayudando a quien pueda del modo que le sea posible, la Navidad es generosidad y solidaridad…y los venezolanos de eso sabemos bastante.
5. Recuerde que las crisis son momentos que pasan y la navidad es esperanza en el porvenir. Suéñelo en grande aunque le cueste y le parezca difícil.
6. La crisis es la oportunidad de probar y ejercitar nuestra verdadera esencia y virtudes cristianas, renunciar a la conmemoración de la Navidad es no haber comprendido nunca el significado que encierra esta tradición. VENDRÁN NUEVAS NAVIDADES DE ALEGRÍA Y GOZO, ésta solo es una Navidad diferente de la que aprenderemos y con la que fortaleceremos nuestro espíritu. ?✨?. María del Carmen Rivas G. Psicólogo Clínico (UCV)