Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos, habló este miércoles con el primer ministro de Trinidad y Tobago, Stuart Young, sobre la banda transnacional Tren de Aragua y la amenaza que representa para la región. Además, agradeció su cooperación para limitar las acciones de la organización criminal.
En un mensaje en la red social X, Rubio indicó que expresó a Young el agradecimiento de Estados Unidos por su «sólida cooperación en materia de seguridad energética, deportaciones de inmigrantes indocumentados y para limitar la influencia maligna en la región».
Rubio y Young se reunieron en Jamaica, la primera parada de una gira por países caribeños del secretario de Estado estadounidense, reseñó Efe.
Desde Trinidad y Tobago, el gobierno informó que las conversaciones se centraron en diversos temas de interés mutuo, como la seguridad nacional, el comercio y la energía.
«Las conversaciones fueron productivas, y ambas partes destacaron la importancia de la relación entre ambos países y se comprometieron a profundizar los lazos», añadió la nota.
Tren de Aragua
El gobierno de Donald Trump mantiene que la banda transnacional, originaria de cárceles venezolanas, fue «enviada por el régimen hostil de Maduro» y que representa una «incursión predatoria» en Estados Unidos que justifica la invocación de la Ley de Enemigos Extranjeros, normativa de tiempos de guerra, para la deportación a una cárcel en El Salvador de supuestos miembros del Tren de Aragua.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, explicó que la Ley de 1798, que permite detenciones y expulsiones sumarias en caso de guerra o invasión, se aplica debido a la actividad del Tren de Aragua.
«Ha sido enviada aquí por el régimen hostil de Maduro en Venezuela», declaró Leavitt.
Añadió que Donald Trump, al asumir la presidencia, designó a la banda como organización terrorista. «Bajo esta ley, el presidente tiene la autoridad para deportar a estos terroristas, o a quienes los apoyan, que han sido enviados a suelo estadounidense», dijo. (EN)
