Una multitud plena de fe y esperanza acompañó la mañana de este domingo 8 de septiembre la imagen de la Virgen del Valle, en el Valle del Espíritu Santo, en la isla de Margarita, estado Nueva Esparta.
Considerando el caluroso clima que se registra estos días en la región insular, este año el inicio de la festividad a las 12 de la noche del sábado 7 tuvo una asistencia mayor de feligreses, y disfrutaron el hermoso momento de la salida de la Virgen en procesión hasta el campo eucarístico y luego un innovador espectáculo de drones.
No obstante, la misa de aurora a las 5 de la mañana y luego la misa Pontifical de las 8, también contó con una gran presencia de creyentes que cumplieron con el precepto de la misa dominical de manera muy especial.
El obispo de la Diócesis de Margarita, Fernando Castro Aguayo, ofició la misa central y en su homilía llamó a tener en cuenta tres aspectos fundamentales como razón de vida: la sencillez de las personas, la importancia de recobrar la calidad educativa y ser promotores de paz.
Para hablar de la sencillez destacó el libro del profeta Niqueas quien anunció que el principe nacería en Belen una población muy pequeña y desconocida, y se hizo grande por eso, porque allí nació Jesús y por la vida humilde de José y María, porque pastores fueron adorar al niño que nació en pañales, porque llegaron reyes de oriente y sin reserva preguntaron por el nacido rey de los judíos. «Es la sencillez y lo pequeño lo que destaca, por eso pido que un Belén nazca cada día en nuestros corazones», dijo Monseñor.
Hizo especial incapié en la educación de los niños, recordando que es también un llamado del Papa Francisco en el denominado pacto educativo global. «Quiero hacerme solidario de los niños de Nueva Esparta, del oriente y del mundo, que reciben una educación de muy pobre calidad, escasa calidad. Ante la innegable vocación docente, la iglesia se suma a través de sus creyentes a ayudar a la formación básica de los niños, para que tengan coordenadas cristianas porque eso los hará mejores ciudadanos. Hagamos que nos duelan los niños», dijo Castro Aguayo, y pidió rezar para que las autoridades estimulen la participación y el servicio al prójimo sin distingo de clase.
En tercer lugar, pidió a los creyentes pedir ayuda a Dios por Venezuela, pero al tiempo ser de manera individual apostol de paz, y destacando que en el 2025 se cumplirán 500 años de la llegada de la imagen de la Virgen del Valle a tierras insulares, propuso que en cada familia y escuela se enseñe el himno de la virgen porque es la mejor identificación como hijos de María. (EU)
