El Movimiento Ecológico de Venezuela (Movev) cuestionó la decisión de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) al suspender la marcha a Miraflores, que estaba prevista para este 3 de noviembre, así como el diferimiento del juicio político al presidente Nicolás Maduro.
El Movev alega que así como el diálogo con el Gobierno, se trata de decisiones que no fueron consultadas con todos los sectores.
La vicepresidenta del Movev, Pastora Medina, considera que no existen garantías de que habrá un cambio por parte del gobierno. A su juicio, además de las exigencias de respeto a la Asamblea Nacional como órgano autónomo, incorporación de los diputados de Amazonas, fecha del referendo revocatorio en 2016 y «frenar el abuso del Tribunal Supremo de Justicia», y liberación de todos los presos políticos, debe incluirse el tema del Arco Minero del Orinoco.
«Estamos a tiempo de que se establezcan condiciones serias y responsables (…) esto puede generar una anarquía porque hay sectores en descontento», advirtió Medina, mientras que en lo que respecta al Arco Minero, asegura que el «el gobierno está aprovechando este escenario para que no se le preste atención».
El sábado se reunirán con indígenas en Maripa, a fin de recabar testimonios sobre la situación de la exploración y explotación del Arco Minero. Para el martes tienen pautado celebrar un foro en Caracas, a objeto de difundir el caso y sumar apoyo de otros sectores y regiones, y el 9 de noviembre llevarán las primeras firmas en rechazo al Arco Minero ante el Tribunal Supremo de Justicia, agotando las instancias nacionales.
