Pese al día nublado y lluvioso, el sábado 22 Luxemburgo se vistió de fiesta para celebrar la boda por Civil de la princesa Alexandra. La joven es la cuarta hija y la única mujer de los grandes duques Enrique y María Teresa. Por su bajo perfil, es una de las royals menos conocidas de Europa.
Alrededor de las 15, la princesa de 32 años y el francés Nicolas Bagory (34) caminaron junto al resto de la familia por la alfombra roja que se desplegó desde el Palacio Gran Ducal hacia el Ayuntamiento, donde tendría lugar el enlace presidido por la alcaldesa Lydie Polfer.
Durante ese recorrido, que también hicieron a la inversa, los novios saludaron y agradecieron las muestras de cariño de la multitud expectante por la unión matrimonial de Alexandra.
Solo quince invitados. Los familiares más íntimos, presenciaron la ceremonia, aunque al atardecer hubo una recepción en el palacio de la que también participaron autoridades de Luxemburgo y otros seres queridos de la pareja.
La boda religiosa será el sábado 29 en la iglesia Saint Thophyme de Boermes-les Mimosas, la región de la Provenza francesa. Allí mismo veranean los Grandes Duques y sus hijos, los príncipes Guillermo (el heredero), Félix, Louis y Sebastián.
La princesa Alexandra y su marido, el francés Nicolas Bagory, agradecieron las muestras de cariño de su pueblo mientras recorrían la alfombra roja que se desplegó entre el Palacio Gran Ducal y el Ayuntamiento.
Una princesa universitaria
Alexandra estudió Psicología y Ciencias Sociales en los Estados Unidos, se graduó en Filosofía en París, y en 2017 obtuvo una Maestría en Estudios Interreligiosos de la Escuela Irlandesa de Ecuménicos con especialización en resolución de conflictos.
Trabajó como voluntaria con los refugiados de Medio Oriente, donde también adquirió experiencia como periodista. También realizó una pasantía de Relaciones Internacionales en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en Nueva York.
Además de ser políglota (habla luxemburgués, francés, inglés, español, alemán e italiano), a la princesa le encanta explorar nuevas culturas a través de la literatura y los viajes. Tiene un pasado como bailarina y gimnasta y en su tiempo libre disfruta de jugar al tenis y practicar esquí alpino y acuático.
Su flamante marido, Nicolas, nació en Bretaña, Francia. Se formó en Filología Clásica y Ciencias Políticas (obtuvo una Licenciatura en latín en La Sorbona) y trabaja en la creación de proyectos sociales y culturales, intereses que tiene en común con Alexandra, con quien ahora compartirá, además, la formación de una familia.(GDA)