Empresarios venezolanos regresan con optimismo a la Bolsa de Caracas, luego de 11 años, confiando en un giro económico similar al de la transición de China en la década de 1980.
Alberto Vollmer, presidente de la compañía Ron Santa Teresa, regresó al mercado de valores recordando la reapertura de la Bolsa de Shanghái hace 30 años. Una estrategia que también seguirá Horacio Velutini, cabeza del Fondo de Valores Inmobiliarios (FVI), convencidos de que hay una liberación de la economía local que difícilmente podrá revertirse.
Según reseñó Reuters, ambos empresarios cuentan por primera vez que son parte de un grupo que se define como “optimistas anónimos” y desde hace meses reúne 39 hombres de negocios, banqueros e inversionistas venezolanos con un punto de vista diferente a buena parte de los portavoces de las asociaciones del sector privado.
El año pasado, la administración de Nicolás Maduro, tranquilizó los controles a la economía, permitiendo así, las transacciones en divisas que por más de 15 años fueron tabú y hoy alimentan el libre comercio local en medio de la crisis y las sanciones de Estados Unidos (EE.UU), aunque las leyes regulatoria sigues vigentes.
Es por ello que Santa Teresa, desde hace tres años, prevé vender hasta seis millones de acciones para recaudar unos tres millones de dólares, con los que ampliará sus bodegas y número de barricas.
“Cada vez que nos sentamos con las autoridades o nos sentamos con otros empresarios decimos que esto hay que hacerlo y que parte de la recuperación de la economía va a pasar por esto”, expresó el dueño del famoso ron.
Dicha jugada sorprende tras seis años de recesión y tres de hiperinflación de un país con un gobierno que alejó a la mayoría de las multinacionales y llevó a grandes y medianas industrias a operar en mínimos, al tiempo que crece la pobreza y la desigualdad.
“Sí creo que Venezuela está entrando en un ciclo de apertura económica liberal”, señaló Velutini.
Los jefes, que han tenido reuniones informales con autoridades estadounidenses por el impacto de la sanciones, estás dispuestos a hablar con el Departamento del Tesoro porque las medidas impuestas para asfixiar a Maduro, están afectando al sector privado que ha sobrevivido estos años duros y quiere subsistir.
Y es que las ofertas de acciones, aunque son aún mínimas en comparación con las que se hacen en otros mercados internacionales, podrían servir como salvavidas para las empresas que se quedaron sin financiamiento bancario.
Cabe acotar que, la bolsa de Caracas fue abandonada en gran medida después de que el fallecido presidente, Hugo Chávez, nacionalizara en 2007 las dos compañías más grandes que cotizaban en ella.
Aunque el intercambio permaneció abierto, su movimiento ha sido pobre y los empresarios consideran que podría crecer si logran persuadir a los reguladores para que permitan vender acciones en dólares.(Venepress)