Venezuela, sumergida en una de las peores crisis económicas, social y política en toda la región y con una de las migraciones más altas del mundo está lejos de ser indiferente a las elecciones presidenciales en Estados Unidos el próximo 3 de noviembre.
El gobierno de Donald Trump ha sido clave en promover acciones que busca poner fin al régimen de Nicolás Maduro y devolver a Venezuela y a sus ciudadanos la libertad y democracia que tanto merece.
Las sanciones impuestas por el mandatario republicano y su apoyo a Juan Guaidó como presidente interino de la República, aún no han contribuido a una salida democrática. Venezuela vive una de las crisis humanitarias más graves de Latinoamérica en décadas. Sin embargo, gane quien gane, “las sanciones y acusaciones contra políticos y militares venezolanos del régimen continuarán”, manifestó el exembajador de Estados Unidos en Venezuela, Charles Shapiro a El Nacional, durante una conferencia virtual en la gira electoral del Centro de Prensa Internacional de Estados Unidos.
“Lo que puedo garantizar es si se trata de un gobierno de Trump o de Joe Biden, no vamos a usar la fuerza militar para invadir Venezuela a menos que haya violaciones de derechos humanos enormes, imprevistas y horribles. Más allá de las terribles violaciones a los derechos humanos que se están produciendo ahora en Venezuela”, detalló Shapiro. Un informe de la ONU acusó al régimen de Maduro de crímenes de lesa humanidad.
Marco Rubio explicó el objetivo de las sanciones contra el régimen de Maduro
“Las sanciones económicas funcionan lentamente en el mejor de los casos”, dijo el exembajador. Agregó que probablemente el mejor ejemplo de sanciones económicas exitosas fue contra “el régimen del apartheid en Sudáfrica”, que mantenía un conjunto de leyes que establecían un sistema desigual y discriminaban a la población negra e india durante gran parte del siglo pasado.
“Nuestras autoridades policiales continuarán buscando y acusando a más personas”, reiteró Shapiro. Indicó además que un gobierno de Biden también buscaría que EE UU trabaje más con los países del Grupo de Lima, creado el 8 de agosto de 2017; eso con el objetivo de dar seguimiento y buscar una salida pacífica a la crisis en Venezuela.
Al ser consultado por de por qué Estados Unidos no ha logrado que Maduro deje el poder, el diplomático explicó que ese es un problema de cómo discurren las relaciones internacionales. ¿Cómo se consigue que otro país haga lo que se cree que debería estar haciendo, sin invadir ese país?, respondió. Reiteró que, sin duda y a pesar de todo, no se usaría la fuerza militar.
“Cuando se trata de un régimen dictatorial no importa cuán empobrecido esté el país”, dijo Shapiro. Consideró que “si eres el líder de un país, tu nivel es bastante bueno. El líder y toda la gente del partido alrededor de ese líder, incluso en el Ejército. Entonces, ¿cómo los induces a renunciar al poder? Es solo un tema gigantesco que ha inquietado a los gobiernos de Barack Obama, Trump y les garantizo, también al próximo gobierno de Estados Unidos”.
La severa crisis que sufre Venezuela derivó, asimismo, en un aumento exponencial en el número de venezolanos que han migrado a Estados Unidos y especialmente a Florida en los últimos 10 años. De acuerdo con el Pew Research Center los venezolanos son una de las comunidades de migrantes latinos que más rápidamente crecen en esa nación.
Sin embargo, Trump no ha concedido a los venezolanos en Estados Unidos el estatus de protección temporal (TPS, por sus siglas en inglés). El Partido Republicano ha votado en contra de esta iniciativa en el Congreso. Biden prometió que, en caso de llegar a la presidencia, lo aprobaría. Esta medida podría ser un importante alivio para miles de venezolanos en situación irregular.
El resultado de las elecciones entre el aspirante a la reelección y su rival demócrata tendrá una influencia directa en el porvenir político de Venezuela.(Agencias)