China publicó una nueva normativa para controlar los servicios de retransmisión de video en directo por internet o «streaming», y que obligará a sus proveedores a obtener certificados y actuar de acuerdo a las leyes vigentes.
Según informa hoy la agencia estatal Xinhua, la regulación, que entrará en vigor el próximo 1° de diciembre, obligará a los proveedores de noticias en vivo por internet a que su contenido sea aprobado por los órganos censores antes de publicarlo.
Actualmente hay más de 300 empresas en China que proporcionan plataformas de retransmisión en vivo de video en la red.
La norma, aprobada por la Administración del Ciberespacio de China (CAC), también establece que los proveedores deberán tener personal capacitado para detener las retransmisiones inmediatamente en caso de que infrinjan alguna ley.
Asimismo, estas compañías deberán clasificar sus retransmisiones «online» según su contenido y número de usuarios, y expulsar y prohibir un nuevo registro de los internautas que violen esta regulación y otras leyes.
Un funcionario del CAC, el órgano responsable de la censura en China, ha explicado que este tipo de retransmisiones han crecido rápidamente, pero algunas de ellas emiten pornografía, violencia, rumores y fraudes «que van contra los valores centrales del socialismo y afectan negativamente a los jóvenes».
Entre las últimas iniciativas de este departamento destacan la censura de Fenda, un servicio que permitía entrevistar a famosos; una normativa que exigía a los buscadores «mejorar la censura» de sus resultados; o la prohibición de videos en los que aparecían personas comiendo plátanos en poses seductoras o eróticas.