El costo del tradicional plato puede variar dependiendo del relleno y del lugar. En el establecimiento más famoso, ubicado en La Candelaria, la arepa más costosa es de Bs 4.500. Esto con rellenos varios como la denominada “Llanera” o “Ternera” que contiene rodajas de tomate, aguacate, carne a la parilla y queso, que debería ser tipo “crineja” o de “mano”, pero que es sustituido por queso blanco rallado debido a la escasez.
Dentro de las más costosas en ese lugar, están además las de rellenos varios. Atrás quedaron los tiempos de la “Pelúa” (que contiene queso amarillo y mechada) como consecuencia de la falta del lácteo o la muy pedida de huevos de codorniz.
Las demás arepas con rellenos sencillos como queso (del que haya), el llamado “perico” (revoltillo de huevos con vegetales), pollo, chuleta o carne mechada se ubican entre los Bs 3300 y Bs 4000.
En el olvido quedó la famosa arepa de huevos de codorniz o queso amarillo. También la mantequilla o margarina. La viuda se ubica en Bs 500 y un café grande con leche cuesta Bs 650.
Sorprende la economía en Las Mercedes
Aunque el ciudadano suele buscar economía de acuerdo a la zona de Caracas, este caso es la excepción. En la arepera más famosa ubicada en las cercanías de la avenida Río de Janeiro a la altura de Las Mercedes, los costos son más bajos que en la urbanización La Candelaria como se piensa contrariamente.
En el lugar, la arepa más costosa, la “Llanera” no cuesta más de Bs 4000. Si se cuenta con suerte, en más de una oportunidad acá se puede conseguir el anhelado queso amarillo, el telita o el de mano.
Los precios aquí varían desde los Bs 2800 en adelante también dependiendo del relleno.
En otros establecimientos de este tipo como el ubicado en la esquina de la Universidad Bolivariana (UBV) en Los Chaguaramos, los precios son muy similares.
El golpe, va directo al bolsillo del venezolano, específicamente para el que percibe un salario mínimo, que actualmente se ubica en Bs. 90.812 con el último incremento salarial decretado el pasado 27 de octubre. Para estos, consumir su plato tradicional, es más que un lujo: Se trata de algo casi imposible.
