El principal tribunal de apelación de Escocia falló contra la decisión de Johnson de prorrogar o suspender el Parlamento hasta el lunes al 14 de octubre, un golpe para el gobierno, que busca abandonar la Unión Europea el 31 de octubre con o sin un acuerdo.
Cuando faltan sólo siete semanas para que Reino Unido abandone la UE, el futuro del Brexit es tan incierto como siempre, y sus posibles escenario van desde abandonar la UE sin acuerdo hasta revocar el referéndum de 2016.
“Pedimos que el Parlamento se reúna inmediatamente”, dijo la legisladora del Partido Nacional Escocés, Joanna Cherry, a Sky News. “No puedes romper la ley impunemente, Boris Johnson”, agregó.
Un grupo de legisladores de la oposición se reunía frente al Palacio de Westminster, de 800 años de antigüedad, exigiendo que su reconvoque la asamblea.
Johnson había anunciado el 28 de agosto que el Parlamento sería prorrogado porque, dijo, el gobierno necesitaba la suspensión para poder lanzar una nueva agenda legislativa.
Los opositores han dicho que la verdadera razón era cerrar el debate y rechazaron sus planes para el Brexit. Al tribunal se le mostraron documentos que mostraban que Johnson estaba considerando la prórroga semanas antes de pedirle formalmente a la reina Isabel que suspendiera la legislatura.
El Palacio de Buckingham no quiso comentar el fallo porque, dijo, es un asunto del gobierno.
Dominic Grieve, uno de los 21 rebeldes expulsados la semana pasada del Partido Conservador de Johnson, dijo que si el primer ministro había engañado a la reina debería renunciar.
Johnson, quien fue una figura principal de la campaña a favor del Brexit en el referéndum de 2016, cuando el 52 por ciento de los votantes lo respaldó, ha rechazado las quejas de la oposición de que estaba negando al Parlamento el derecho a debatir el Brexit.
En un fallo crítico, los jueces escoceses dictaminaron que la razón principal para la suspensión fue obstruir a los legisladores y permitir que Johnson siguiera una política de Brexit sin acuerdo.
“Este fue un caso escandaloso de un claro incumplimiento de los estándares de comportamiento generalmente aceptados de las autoridades públicas”, concluyó un juez, Philip Brodie, según un resumen del veredicto judicial.
Merkel tiene esperanza de lograr un Brexit con acuerdo
Angela Merkel, canciller de Alemania, afirmó este miércoles que todavía hay muchas posibilidades de que la separación del Reino Unido de la Unión Europea (UE) se de por medio de un acuerdo. Sin embargo, Berlín está preparado para un Brexit caótico en el caso de que la negociación no se de.
La intención, según explicó Boris Johnson, primer ministro británico, es persuadir a la UE de ofrecer un nuevo pacto en la cumbre del 17 y 18 de octubre. El Congreso británico aprobó una ley que lo obligó a solicitarle a Bruselas un retraso hasta 2020 en la planeada salida del bloque el 31 de octubre, a menos que se concrete un acuerdo. No obstante, es algo que Johnson ha asegurado que no hará.
“Todavía tenemos muchas posibilidades de conseguir un (Brexit) organizado y el gobierno alemán hará todo lo posible para que eso sea posible, hasta el último día. Pero también digo que estamos preparados para un Brexit turbulento”, aseguró Merkel.
“Pero el hecho es que después de la retirada del Reino Unido, tenemos un competidor económico en nuestra puerta; incluso si queremos mantener una estrecha cooperación económica exterior, de seguridad y de lazos de amistad”, agregó.
Motivado a estas declaraciones, el canciller alemán, Heiko Maas, confesó al Parlamento que “no nos gusta (el Brexit), pero no le tenemos porque nos hemos preparado por largo tiempo, incluyendo el caso de un Brexit desordenado”.
La Cámara de Comercio británica en Alemania, que promueve los vínculos comerciales entre las dos naciones, confirmó que pese a que el Brexit causaba incertidumbre, era una mejor idea retrasar el proceso.
“Creemos que las consecuencias negativas de un Brexit sin acuerdo son tan grandes que un retraso realmente tiene sentido”, indicó Michael Schmidt, presidente de la agrupación comercial, en una rueda de prensa.
Un divorcio sin acuerdo configuraría radicalmente el comercio; especialmente en las cadenas de suministros para los fabricantes entre Reino Unido y la UE, siendo este su más grande mercado de exportación; y, además, generaría una mayor incertidumbre legal para las compañías y los ciudadanos. (Reuters)