Caracas. El alcalde del municipio Sucre de Caracas, el opositor Carlos Ocariz, acudió hoy al Ministerio Público (MP, Fiscalía) para pedir una investigación independiente sobre una explosión ocurrida recientemente a la que fue vinculado, y denunció una persecución por «pensar distinto».
«Nosotros queremos que se realice una investigación seria, una investigación que no tenga matices políticos o politiqueros, una investigación donde no puede estar involucrado el Sebin (Servicio de Inteligencia venezolano), porque es evidente el sesgo político que tiene», dijo Ocariz a periodistas frente a la Fiscalía.
El director del Sebin, Gustavo González López, anunció el martes que investigan al alcalde por su presunta implicación en el lanzamiento de una granada el pasado 2 de octubre contra un puesto de la Guardia Nacional Bolivariana en la zona de Petare, en el municipio que dirige Ocariz, que hirió a 17 personas entre civiles y militares.
«El Sebin que no quiere investigar en función de lo que corresponde a la ley sino en función de manifestaciones o posturas partidistas, o políticas, o ideológica o de persecución, de persecución de aquellos que pensamos distinto», dijo hoy Ocariz.
En este sentido pidió que se investigue «a fondo lo que sucedió» porque, dijo, «hay varias versiones de lo ocurrido» con la explosión producida por la detonación de granadas en la comunidad de Petare del municipio Sucre.
Bajo la tesis del alcalde opositor, explosivos de ese calibre son manejados solo por los organismos que dependen de la Fuerzas Armadas Nacional Bolivariana (FANB).
Según varios dirigentes de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), las acusaciones contra Ocariz forman parte de una acción del Gobierno de Maduro para «perseguir» a quienes impulsan un referendo revocatorio para cesar el mandato presidencial.