Ninguna de las cuatro alternativas al brexit que votaron este lunes los diputados de la Cámara de los Comunes británica logró una mayoría.
La opción que recabó más apoyos -280 votos a favor y 292 en contra- fue la que solicita al Ejecutivo de la conservadora Theresa May que, en el caso de que el Parlamento apruebe un acuerdo de salida, este tenga que ser ratificado por el pueblo británico en un referéndum.
La Cámara de los Comunes se había propuesto sacar el proceso del punto muerto en que se encuentra a menos de dos semanas del nuevo límite impuesto por Bruselas para hallar una solución, el 12 de abril. Pero, como ya había ocurrido la semana pasada, ninguna de las propuestas logró desbloquear la crisis del divorcio entre Londres y Bruselas.
La salida de Reino Unido desde la Unión Europea se mantuvo el lunes en un punto muerto, después de que el Parlamento no aprobara una alternativa al acuerdo de divorcio de la primera ministra Theresa May.
Luego de una agitada semana en la que la estrategia de divorcio de May fue rechazada por los legisladores por tercera ocasión, a pesar de que ofreció renunciar si ser aprobada, la futura dirección del Brexit sigue inmersa en la confusión.
En un intento por superar el impasse, los legisladores votaron el lunes sobre cuatro alternativas para el Brexit, pero todas fueron rechazadas. (Agencias)